Algunas mezclas necesitan un empujón para conseguir destacar, en especial cuando se refiere a la frecuencia. Una de las maneras menos conocidas de hacerlo es usando enriquecimiento armónico o comúnmente nombrado saturación.
En este curso te enseñamos el concepto del trabajo con enriquecimiento armónico, sus beneficios y cómo te puede aportar al mezclar en el sonido final de tus producciones.
Si alguna vez te pasó de tener una mezcla que en el estudio sonaba terminada y muy bien, pero al salir afuera dejaba mucho que desear, probablemente te hacía falta usar saturación.
La saturación es la generación de armónicos en una señal para que pueda llenar mejor el espacio, en especial las frecuencias medias que son las que más cuentan cuando queremos trasladar nuestra producción al exterior.
Un elemento que se beneficia mucho de esta técnica es el bajo, que a veces sufre mucho cuando se intenta reproducirlo en sistemas pequeños. En el curso te mostramos cómo puedes trabajar con distorsión para representar el bajo en las frecuencias medias, ganar armónicos y presencia en la mezcla.
Esta técnica puede ser utilizada tan solo para realzar un poco la presencia del instrumento o para que se note totalmente distorsionado y adquiera otra dimensión tonal de igual manera.
Otro elemento que es candidato para el uso de saturación es la voz, que debe cortar en la mezcla estar al frente y muchas veces al hacerlo con nivel hace que la voz termine sonando despegada del resto de los elementos.
Aplicando distorsión en cantidades medidas la voz puede estar en primer plano sin molestar al oyente y adquirir una presencia única. En el curso te mostramos cómo combinar la saturación con una voz para lograr eso y que consigas un sonido destacado para tus voces al producir.